El pasado 28 y 29 de enero participé en la Half Costa Blanca Bike Race celebrada en Benidorm (Alicante) en la modalidad de parejas. Creo que era la segunda carrera UCI en la que participo (la primera fue la Quebrantahuesos MTB de 2015 en la que se competía por el Campeonato de España de Bike Maratón) y como tal significa que va a ser dura y técnica de narices (nada que ver con las marchas típicas de fin de semana) ya que esta enfocada a los corredores profesionales. Ha sido una prueba que si no hubiera estado marcada por el barro acumulado de las ultimas lluvias hubiera sido un disfrute total por las cantidad de sendas técnicas que había, lo cual me dejó un sabor agridulce (quizás porque no acostumbro a moverme por este tipo de terrenos). Si el primer día estuvo marcado por el barro y acabe un poco hasta las "boulings" de empujar la bici, el segundo me hizo cambiar mi estado de animo pues fue una de las etapas mas cortas, duras y técnicas que he realizado hasta la fecha y la verdad es que la disfruté mucho. En el apartado físico me encontré un poco espeso el primer día, con las pulsaciones por las nubes pues esperando la salida mi Garmin ya marcaba 80% de mis máximas (no tengo ni idea el motivo, quizás no me sentó bien el desayuno o la cena, nervios, poca hidratación, yo que se...). El caso es que con el ansia de seguir a mi compañero acumulé mucho desgaste muscular que inevitablemente me llevó a acalambrarme a mitad de recorrido, mermando mi ritmo hasta el final de la etapa. El segundo día nos esperaba un etapón que perdurará en mi memoria por su dureza, (nada mas que 1.500 metros acumulados en tan solo 35 kms) quizás lo mas corto y duro que he hecho en mi vida. Aquí tengo que decir que me encontré mucho mejor que el primer día (esperando la salida tenia las pulsaciones al 35% o sea que estaba muy relajado) y pude mantener un porcentaje de pulsaciones en carrera bastante bueno. Sin embargo la dureza del recorrido y el ácido láctico acumulado del día anterior hizo mella de nuevo en los últimos kilómetros. Con la impotencia de no poder pedalear en los tramos empinados con el problema añadido del cambio que me impedía poner las dos coronas grandes, seguimos para adelante. En esta etapa apenas habían zonas de barro y las pocas que hubo las intenté afrontar sin bajarme de la bici. Las sendas con tramos tecnicos super divertidas y con rocódromo artificial incluido. La parte final con la subida al castillo de Polop preciosa donde nos esperaban los últimos metros que pude hacer pedaleando midiendo los esfuerzos para no acalambrame (y fuerzas tenia de sobra pues pude acelerar la cadencia y poder adelantar con facilidad a unos pocos participantes en los últimos metros).
De aquí me llevo la lección aprendida para cualquier carrera por etapas... lo que hagas el día anterior influye y mucho en el siguiente y es acumulativo. También me llevo algunas otras sensaciones para analizar detenidamente y mejorar. Para finalizar dar las gracias a todos los amigos de los pedales que tengo en Alicante que se acercaron a ver la carrera, animar, participar en ella o hacer fotos, en cierta manera todo ello me hizo sentir como en casa. No descarto volver a participar el año que viene y hacer la prueba completa de 4 etapas. Aunque fui sin apenas tocar la bici de montaña y prácticamente sin trabajar la fuerza en bicicleta, la Costa Blanca Bike Race fue un buen test para ver como iba la progresión de mi estado de forma (y de paso exprimir la nueva Trek Procaliber).
De aquí me llevo la lección aprendida para cualquier carrera por etapas... lo que hagas el día anterior influye y mucho en el siguiente y es acumulativo. También me llevo algunas otras sensaciones para analizar detenidamente y mejorar. Para finalizar dar las gracias a todos los amigos de los pedales que tengo en Alicante que se acercaron a ver la carrera, animar, participar en ella o hacer fotos, en cierta manera todo ello me hizo sentir como en casa. No descarto volver a participar el año que viene y hacer la prueba completa de 4 etapas. Aunque fui sin apenas tocar la bici de montaña y prácticamente sin trabajar la fuerza en bicicleta, la Costa Blanca Bike Race fue un buen test para ver como iba la progresión de mi estado de forma (y de paso exprimir la nueva Trek Procaliber).